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DeWitt,
nicho lujoso y neo-clásico

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junio 2011


Los primeros relojes que llevan la firma DeWitt aparecieron a finales del 2003, hace más de siete años. Cuando nos fijamos en el recorrido de la marca hecho en un tiempo tan corto, es difícil de creer que sólo han sido siete años. Y en este preciso momento es aún más notable por muchas razones, sobre todo teniendo en cuenta que estos últimos años han sido de crisis económica, combinada con una oleada de nuevas marcas que llegan a la escena relojera. Sin embargo, durante estos siete años, DeWitt ha destacado, por encima de todo, por su consistencia, firmeza y continuidad.

Desde sus primeros modelos, se han mantenido los códigos de diseño esenciales de la marca, y DeWitt nunca se ha apartado del camino que eligió. Pero ¿cómo podemos definir este verdadero «DeWitt style» que hace que sus cronómetros sean tan fácilmente reconocibles por su iluminada clientela, ¿a quien se dirigen sus piezas exclusivas? En respuesta a esta pregunta, Jérôme de Witt manifiesta que él siempre ha querido crear “un nicho especial en el segmento de alto lujo, compuesto por productos de muy alta calidad que son técnicamente diferentes, innovadores y estilísticamente reconocibles por su atractivo neo-clásico, por su sabor aristocrático."
A esta definición se le puede añadir el objetivo, ya anunciado en un principio, de una forma gradual de dominio y «dominar» la creación de relojes en todos los aspectos: técnicos, a través de la construcción mecánica y la innovación, el arte de la relojería, a través de los rigurosos requisitos de calidad y diseño, y por la búsqueda de una profundización de una visión particular. Paso a paso, por tanto DeWitt ha evolucionado progresivamente hacia la integración de todas las operaciones en su manufactura.

DeWitt, nicho lujoso y neo-clásico TWENTY-8-EIGHT TOURBILLON, TWENTY-8-EIGHT AUTOMATIC

La determinación de ser un pionero
Desde el punto de vista mecánico, así como estéticamente, Jérôme de Witt se ve a si mismo como un pionero. Recuerda que cuando lanzó sus primeros relojes a principios del 2000, «todos los biseles de los relojes tenían forma de círculos suavizados, por lo general discretos, mientras que hoy en día, todos los biseles son mucho más expresivos», de la misma manera que sus propios biseles siempre han sido muy cortantes, montados en cajas estructuradas, decoradas con columnas. Esto también se aplica a la marca. DeWitt está por lo tanto, orgulloso de haber estado entre los primeros en proponer un paso más, proponiendo esferas tridimensionales formadas con la técnica de «capas» que son muy complejas de realizar. Y, ¿no hizo también «justo antes de que todos los demás»?, ya que hoy en día «casi el 80 por ciento de las esferas están estructuradas de esta manera».
El trabajo especial y altamente refinado trabajo de las esferas ha sido siempre uno de los puntos fuertes de la marca. ¿Quién puede olvidar la increíble esfera brillante e iridiscente tallada en delicadas placas de silicio tintado que se presentó en 2007? Este año, podemos ver la fina rejilla en la que se suspende el carro del tourbillon del Twenty-8-Eight de la marca, una parrilla que todos decían que era imposible producir. Y entonces, el excepcional guilloché con patrón de rayos solares en el Twenty-8-Eight, que demuestra perfectamente el gran dominio alcanzado por la marca en este ámbito. De hecho, es uno de los pocos relojeros que producen esta artesanía guilloché artesanal, en la mayoría de los casos consagrados por el tiempo, de la mejor manera que sea posible, utilizando máquinas tradicionales, algunas de las cuales datan del siglo XVIII.

«Comenzando por el final...»
Técnicamente, DeWitt también ha querido innovar. De buena gana describe su propio método calificándolo como «audaz», sin duda, pero también como «pragmático». Como ejemplo, él describe cómo algunos de los avances mecánicos fueron introducidos en sus diferentes cronómetros, evocando la fuerza constante, el uso avanzado de los diferenciales, y el mecanismo patentado de cuerda automática secuencial (ASW), impulsado por una masa oscilante periférica.
“Empezamos por el final, si podemos decirlo así, mediante el desarrollo de movimientos complicados «, explica Jérôme de Witt,» pero tarde o temprano, vamos a tener nuestro propio movimiento de base, en el que ya estamos trabajando. Para los más complejos de nuestros propios movimientos, siempre hemos tratado de trabajar de una manera muy pragmática. Y, sobre la base de decisiones tomadas desde el principio, nuestro objetivo es proponer algo diferente. Un ejemplo es el rotor periférico que se utiliza este año en el regulador del Twenty-8-Eight A.S.W. Horizonts. Comenzamos con la cuestión técnica que nos habíamos propuesto, y con ello nuestro objetivo, hemos avanzado paso a paso, poco a poco en la integración del diseño y la técnica."
A partir de este particular enfoque es de donde viene la impresión de total consistencia de esta pieza remarcable presentada este año en BaseWord. Este nuevo tourbillon automático una esfera para el regulador, ha sido enteramente desarrollada y producida por la manufactura DeWitt, y está basada en el calibre DW 8014, presentado el año pasado. Pero integrando una masa oscilante periférica bi-direccional, cuya forma interior es sinusoidal (pueden ver una fotografía aquí). Oscilando, este anillo sinusoidal, equipado con dos brazos de carga, dirige el sistema automático de carga secuencial (A.S.W.). Un sistema que embragando y desembragando, desconecta la carga cuanto esta ha llegado al 96% de la reserva de marcha (el desembrague trabaja usando una palanca que desconecta el brazo de tracción del engranaje de carga). Este sistema, garantiza una distribución constante y estable de la energía al escape. Cuando la reserva de marcha decrece y llega al 92 por ciento, el brazo toma contacto con el engranaje de carga otra vez, lo cual garantiza un rango de operación ideal. Por otra parte, este movimiento tourbillon, muestra un balancín de inercia variable equipado con un muelle de balancín Straumann con curva de Philips, contiene un mecanismo liquidador de segundos que efectúa un salto por segundo. Esta palanca está operada directamente por el carro del tourbillon, a través del intermediario, un pequeño piñon que se deliza sobre cada diente del engranaje de los segundos, mecanismo que otorga a esta pieza relojera la clasificación de “regulador”

DeWitt, nicho lujoso y neo-clásico TWENTY-8-EIGHT REGULATOR A.S.W. HORIZONS

Inspirado en Nueva York y el Art Déco
Emblemático de la nueva colección Twenty-8-Eight, el diseño de este reloj fue inspirado por el movimiento «racionalizador» del período Art Déco y por la ciudad de Nueva York, a los que rinde homenaje. La jaula del tourbillon está, pues, montada en una placa que evoca las columnas de un edificio de estilo Art Déco, cuya base está decorada con un patrón de rayos solares que se ensanchan hacia los lados. Encontramos esta misma decoración en formas ligeramente diferentes en las otras piezas de la colección, como el muy encantador Twenty-8-Eight Tourbillon (equipado con un movimiento que fue diseñado por completo y producido por la propia firma, incluyendo la espiral). Su carro de torbillon semi-transparente - coronado por una serie de columnas de estilo futurista y Art Déco - está montado sobre una parrilla muy delicado, que permite discernir los latidos del movimiento. Como suele ocurrir en DeWitt, un diseño en patrón solar irradia sobre la esfera dividida en dos zonas de colores: antracita y crema, gris y azul misterioso.
Un motivo radiante similar se encuentra en el Twenty-8-Eight, particularmente elegante y refinado, dividido en dos zonas de guillochage, tono sobre tono. Uno de ellos es central y evoca las llamas, mientras que el otro se irradia hacia el borde. Esta pieza, que de Witt califica como «urbana y clásica», da una impresión de ligereza y sutileza - mientras que al mismo tiempo posee los rasgos distintivos y afirma las características de la marca. La caja es más pequeña, el motivo tradicional de decoración con las columnas a los lados de la caja es más suave, y los cuernos son más delgados. Pero todo el resto es, sin duda «DeWittian».
Podríamos decir lo mismo acerca del carácter «DeWittian», esta vez más eminentemente deportivo que está en la naturaleza de los nuevos modelos Academia Quantième Perpétuel Sport y Chronostream .La inspiración “retro-futurista”, el diseño en patrón de rayos solares, las muescas muy notables en el bisel, y la limpieza de las líneas se encuentran presentes en estos modelos que ofrecen una visión neo-clásica que es bastante rara en el dominio de los relojes deportivos. Este neo-clasicismo, en el caso particular del muy rojo Academia Quantième Perpétuel Sport, va de la mano con los materiales más modernos, como el titanio en la caja, el bisel, la corona y los tornillos, y con el caucho negro insertado entre las columnas en los laterales de la caja..
Desde los particularmente avanzados – acabados satinados verticales alternados con acabados satinados circulares, las superficies pulidas y biseladas del movimiento visible a través del cristal de zafiro de la parte trasera de la caja, alternando superficies mates y brillantes - hasta la correa de caimán negro pespunteada en rojo, confieren a este pieza un aspecto deportivo y perfectamente lujoso. [Para los muy notables relojes para mujer, presentados por DeWitt en Baselworld, ver el artículo Women’s Watches Galore de Sophie Furley.]

DeWitt, nicho lujoso y neo-clásico ACADEMIA QUANTIÈME PERPÉTUEL SPORT, ACADEMIA CHRONOSTREAM

En el corazón del servicio
«Tratamos de llegar al lujo perfecto», como a Jérôme de Witt le gusta decir, ya que «la noción de lujo no es puramente comercial y no se limita a sólo el objeto en sí. El lujo es también todo lo que rodea el producto, todo lo que ello conlleva. El lujo es el intercambio de valores comunes».
La noción de servicio y de compartir (de «transparencia» diríamos hoy) está en el corazón de todas las actividades comerciales de DeWitt. De esta manera, a partir de mayo del 2011, cada reloj va acompañado de una tarjeta de garantía electrónica. Personal y que contiene el número ID del reloj, que le da al propietario un acceso protegido por contraseña a un área exclusiva dedicada a él. «Queremos crear una conexión directa con nuestros clientes, para profundizar nuestra relación con él», explica Jérôme de Witt. «Esta relación implica, naturalmente, el excelente servicio que ofrecemos. Para muchas marcas, la noción de servicio se ha alterado dramáticamente: el servicio se ha convertido en un centro de beneficios. Nos hemos comprometido a lo contrario. Usando esta plataforma de intercambio y de la trazabilidad, podemos recuperar las piezas que son necesarias, y ofrecer un servicio gratuito para nuestros clientes, a quienes consideramos como verdaderos socios. Además, esta nueva tarjeta, que da acceso a un área exclusiva e interactivo de intercambio y que va a evolucionar, se está entregado con cada reloj. Seguirá el reloj durante toda su vida útil. Pero también es retroactiva: para aquellos que han comprado relojes DeWitt antes, pueden tener su propia tarjeta simplemente solicitándolo».
Este servicio de calidad superlativa se refiere así a todas las piezas DeWitt en circulación, o cerca de los 10.000 relojes creados durante los primeros años de la saga aristocrática de la marca. De hecho, esta saga, a su manera, no ha hecho más que empezar. Vamos a esperar hasta que la integración de la manufactura DeWitt sea aún más completa, y en la que seremos capaces de descubrir, en los próximos años, los movimientos básicos propios de la marca de Ginebra, así como los cronógrafos integrados que se propone desarrollar.

De Witt X Watch
Para el tercer reloj de DeWitt para la Only Watch Charity Auction en favor de programas de investigación de la distrofia muscular de Duchenne (DMD), (que se celebrará en Mónaco el 22 de septiembre), DeWitt a continuado con su exploración de los relojes reversibles. Después del Antipode del año pasado, el X-Watch lleva este concepto aún más lejos. La ’X’ en forma de sombrero que cubre parcialmente la esfera del reloj se activa mediante cuatro pulsadores colocados en la parte superior e inferior de la caja. Presionando los pulsadores, la ’X’ se separa por el medio y sin problemas se abre para revelar la cara del reloj. Un mecanismo especial se ha integrado para controlar la velocidad de apertura. La rotación de la caja de titanio de grado 5 de 49 mm se libera solo cuando la ’X’ está en posición abierta. El caja puede ser volteada y vuelve a bloquear el cierre de la ’X’. Como es natural, la «X» está diseñada de tal manera que todas las funciones del reloj siguen siendo perfectamente legibles incluso cuando la tapa está en la posición cerrada. El X-Watch cuenta con un solo movimiento reversible que muestra indicaciones bi-retrógradas de horas y minutos en cada lado, un cronógrafo en un lado y untourbillon automático en el otro. El calibre también cuenta con un sistema patentado de cuerda automática secuencial (A.S.W)dispositivo impulsado por un rotor oscilante periférico. Construido a partir de algunos de sus 535, el calibre DW 8046 es la ilustración perfecta de la audacia inventiva de los maestros relojeros de DeWitt.

DeWitt, nicho lujoso y neo-clásico

Fuente: Europa Star Magazine Junio - Julio del 2011