Creado en la nueva Maison des Métiers d’Art en las instalaciónes de La Chaux-de-Fonds, el reloj Ronde Louis Cartier Filigree reinventa la técnica centenaria de la filigrana con un precioso enfoque figurativo.

Un método de patrimonio creativo que es testimonio de la misión de Cartier de perpetuar artesanías olvidadas y conocimientos tales como la granulación en 2013. El antiguo arte de la filigrana apareció en Egipto en la más remota antigüedad. Su invención se atribuye a los sumerios alrededor del 3000 aC antes de ser desarrollado en la India, el Tíbet, Grecia e Irán, y mucho más tarde en Portugal, donde alcanzó un nuevo nivel de excelencia.

Diáfana como el encaje, la filigrana es una técnica de orfebrería que utiliza hilos de oro o plata soldados entre sí con el fin de crear una cuadrícula de calado con el motivo deseado.

Para Cartier, el reto consistía no sólo en su adaptación a las dimensiones restringidas de una caja de reloj, sino también elevar este arte, al optar por una muy preciosa selección de materiales de joyería, tales como oro, el platino y los diamantes.

Reloj Ronde Louis Cartier XL, motivo de panteras en filigrana

Los artesanos de la Maison des Métiers d’Art trabajaron con microhilos de oro y platino batidos que requieren equipos específicos especialmente creados en el sitio. retorcidos, aplastados, encrespados y cortados en pequeños anillos, se reunen estos hilos mediante la técnica de filigrana del «calado» que permite a los elementos que se unan por los lados, pero no a la base.
Se requiere un mes de trabajo para crear este reloj de encaje que es el hogar de una pareja de panteras cuyos abrigos de manchas negro-laca están literalmente tejidos a partir de elementos de filigrana fina de oro y platino con diamantes.

Soberanamente drapeadas en brocado, las dos panteras se miran la una a la otra con sus ojos de esmeralda cortadas a medida
Este delicado tête-à-tête felino tiene como telón de fondo un cielo estrellado y rodeado por un medio-pavé engastado con diamantes, que está parcialmente cubierto por el motivo.
Esta obra de arte excepcional reúne a numerosos tipos de artesanía, del engaste de piedras preciosas a la orfebrería, desde el trabajo de joyería a la relojería, del grabado al lacado. Un millar de acciones que dan al emblemático animal de Cartier una preciosidad rara con un equilibrio, gracia y elegancia absoluta que es tan etéreo como el más fino encaje.

Fuente: Cartier