La elegancia Romana y la precisión Suiza se combinan en una serie de edición limitada muy pura y refinada, que es a partes iguales alta joyería y alta relojería.

La idea que Bulgari tuvo al desarrollar el Divas’ Dream Tourbillon Skeleton era demostrar el dominio de la casa tanto de la alta relojería como de la alta joyería. Al confiar en un trabajo abierto, la intención era refinar las dos habilidades diferentes y hacerlas inseparables. Creo que es seguro decir que Bulgari ha logrado hacer precisamente eso.

Esta última creación de la Maison, con sede en Roma, es ciertamente una hazaña de la ingeniería mecánica, pero también es bastante alegre, como podríamos esperar de su patrimonio Italiano. Una particular forma se destaca en este reloj, que se deriva de su patrimonio claramente Romano: el abanico.

El abanico es el símbolo de la colección Diva’s Dream, que ha adornado históricamente las paredes de los antiguos baños romanos. Los relojes de esta colección deben parte de su look refinado a sus cuernos de la pulsera en forma de abanico, un motivo que también conecta las joyas y relojes de la marca.

La esfera del reloj está muy en el lado naturalista. Evoca el arte de los jardines, otra disciplina en la que Bulgari y los Italianos sobresalen, y este reloj es un gran ejemplo de una manera gráfica de organizar la naturaleza en la esfera.

En medio de todo el follaje, un colorido loro aparece en la esfera, que ha sido elaborada a mano a través de micro-pintura y esmaltado, una disciplina compleja que Bulgari ha dominado gracias a su experiencia en joyería.

En contraste con la colorida visión de la naturaleza en la esfera tenemos una caja de 37 mm de diámetro - disponible en oro blanco o rosa - que se engasta con unos impresionantes 76 diamantes de talla brillante.

El corazón mecánico del reloj es un movimiento mecánico adaptado, el BVL Calibre 208, que ha sido totalmente desarrollado y montado por la manufactura de Suiza.

Todos los elementos de la estructura del movimiento, incluidos los puentes y las platinas, están finamente calados. El acabado en el reloj es bastante notable, con algunas partes pulidas y otras satinadas-cepilladas o con graneado circular. Todas estas operaciones se realizan a mano, añadiendo ese nivel extra de precisión y conectándose con la tradición.

No es de extrañar que el Divas’ Dream Tourbillon Skeleton lanzado en una edición estrictamente limitada de 50 ejemplares – que muestra la gran dificultad y el tiempo que implica para los artesanos manuales que limita la producción y hace a cada reloj extremadamente valioso y precioso.