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Jaeger-LeCoultre Rinde Tributo a la Astronomía en 2015 con un Nuevo Master Calendar

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enero 2015


El nuevo Master Calendar de Jaeger-LeCoultre se distingue por sus virtudes y de hecho por la misma faz de la astronomía.

Dotado de todos los atributos que han forjado el éxito de esta línea, también es increíblemente único y especial, gracias a la elección de la piedra meteorito para componer su esfera.

Una vez que han aterrizado o han quedado enterrados varios centímetros en la tierra, los meteoritos a menudo pasan desapercibidos, si no es a los ojos experimentados de los que hacen una profesión de su recolección.

Los cazadores de meteoritos distinguen entre aquellos que se han visto caer realmente y los que son hallazgos afortunados. Los conocedores han considerado durante mucho tiempo la Antártida como una especie de Eldorado, ya que la capa de hielo promueve una concentración de estas piedras que se elevan a la superficie cuando el hielo azul se erosiona debido a los vientos katabáticos (cuesta abajo).

Este continente es, sin embargo ahora coto exclusivo de los cazadores científicos de meteoritos y toda explotación comercial está prohibida.

Jaeger-LeCoultre Rinde Tributo a la Astronomía en 2015 con un Nuevo Master Calendar

Trabajando con un Fragmento Celestial
En este nuevo reloj, la extraña y fascinante piedra de meteorito utilizada para la esfera sacude la tradicionalmente pura estética, discreta del Master Calendar. Compuesta a partir de un solo bloque de meteorito descubierto y registrado oficialmente en Suecia, procede del cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter.

Sin embargo, su contenido de hierro hace que este material sea difícil de trabajar. Para tener una esfera estéticamente perfecta, este bloque de meteorito se corta en varias placas delgadas en un proceso que implica un sinnúmero de precauciones, hasta que se logae la placa exacta que corresponde a las exigencias impuestas por Jaeger-LeCoultre.

Todavía en su estado bruto en esta etapa, el meteorito debe someterse a varias fases de preparación antes de revelar su estructura que ofrece un modelo único mostrado por cada corte. Al final de un procedimiento largo y delicado, puede por fin expresar la belleza que se ha almacenado a través de varios millones de años. La Experiencia es indeciblemente dinámica, como si una parte del universo convergíera hacia la esfera de piedra, por fin a su alcance.

Jaeger-LeCoultre Master Calendar con esfera de piedra de meteorito, oro rosa
Jaeger-LeCoultre Master Calendar con esfera de piedra de meteorito, oro rosa
Jaeger-LeCoultre Master Calendar con esfera de piedra de meteorito, acero inoxidable
Jaeger-LeCoultre Master Calendar con esfera de piedra de meteorito, acero inoxidable

Funciones
El giro de la Tierra sobre su eje determina la duración del día, mientras que su rotación alrededor del Sol define el año. Del mismo modo, las fases de la luna - y la diferencia aproximada de 29 días entre dos lunas nuevas - están detrás de la duración de la semana y el mes.

Cada civilización importante ha querido transmitir a través de un calendario los diversos movimientos celestes que ha observado.

Las indicaciones de calendario relacionadas se encuentran entre los más útiles que un reloj puede ofrecer. En representación de la icónica complicación de calendario, el calendario completo del modelo Master Calendar muestra el calendario perpetuo por medio de una aguja larga con punta en forma de una luna creciente que barre alrededor de una escala alrededor del borde de la esfera que se ha graduado del 1 al 31.

También indica el día de la semana y el mes en aberturas gemelas a las 12 horas. Utilizado en ciertos relojes de bolsillo del Renacimento antes de ser más ámpliamente utilizado en el siglo XIX, este display numérico sirve para captar la atención y concentrarse firmemente en el presente.

Por último, el calendario completo indica las distintas fases de la Luna - Luna nueva, cuarto creciente, luna llena y cuarto menguante - en la forma tradicional de este cuerpo celeste emblemático emergiendo de entre dos nubes y levantándose contra de un cielo lleno de estrellas.

Fuente: Jaeger-LeCoultre