Un estudio reciente revela que los smartwatches de mayor venta en el mercado tienen graves problemas de seguridad. Tengan cuidado los usuarios...

Recuerdo que estaba en la escuela primaria (alrededor del año 1998), y durante una clase. la maestra tenía aparentemente necesidad de un descanso y decidió poner en clase una película. Después de pulsar «play», salió de la clase, confiando que íbamos a observar cuidadosamente la película y comportarnos.

En ese momento, un compañero de clase señaló con su reloj hacia el televisor y detuvo la película. Luego cambió los canales y nos encontró algo más interesante que ver. Por unos pocos minutos, ese joven fué el chico más popular de la clase.

Se puede decir que esta fue mi primera exposición a los precursores de los smartwatches de hoy. Su reloj tenía la funcionalidad de infrarrojos lo que lo hizo capaz de actuar como un mando a distancia, algo que era increíble para mí.

Efectivamente, cuando la maestra regresó, el reloj fue confiscado y el culpable fue enviado a la oficina del director (su popularidad duró el mismo tiempo también, por desgracia). Y esto parece ser todavía un problema hoy en día. Las escuelas de todo el mundo prohiben el uso de smartwatches en el aula. Por un lado, se distraen. Pero lo más obvio es que se puede utilizar para hacer trampa en los exámenes y cosas similares.

Por desgracia, la mente innovadora siempre encontrará una manera de hacer trampa.

Pero ese tipo de «trampa» puede ir en ambos sentidos. Mi historia muestra como un reloj de pulsera se puede utilizar para «hackear» un aparato de televisión. Pero ¿qué pasa cuando se va a la inversa, cuando el reloj es el vulnerable?

Todos sabemos ahora de los peligros de la piratería en nuestras computadoras personales. Incluso los teléfonos móviles se engalanan cada vez más con aplicaciones antivirus. Así que es sorprendente que los smartwatches siguan siendo vulnerables en términos de seguridad, de acuerdo con un informe reciente. Esto llama la atención, sobre todo porque a menudo se replican las funciones que se realizan por parte de nuestros ordenadores y teléfonos móviles, por ejemplo, el correo electrónico, la banca on-line, etc.

De acuerdo con el gigante estadounidense de la tecnología Hewlett-Packard, los mejores smartwatches que están en el mercado tienen problemas de seguridad. La empresa probó 10 wearables en su seguridad, entre ellos los ofertados por parte de Apple, Pebble, Samsung y Sony. Ellos se pusieron a prueba para funciones como la protección con contraseña y la encriptación de datos.

El estudio halló que todos los relojes tenían por lo menos un área problemática. Y la razón podría ser la feroz competencia y la necesidad de llegar al mercado antes de que todos los detalles estén ordenados. Mark James, especialista en seguridad de la firma de seguridad on-line ESET, reportó a la BBC diciendo:

«Mantenerse al día con otros fabricantes para ser un precursor en este campo de la tecnología puede obligar a los productos que se publicará sin la atención necesaria a lo seguro que son en realidad.»

Las principales conclusiones del análisis fueron:

 * La mitad de los relojes ensayados tiene una función de bloqueo para evitar que otras personas tengan acceso
 * Nueve de los diez relojes enviaron algunos datos sin cifrar, lo que significa que podrían ser hackeados fácilmente
 * Dos de los smartwatches fácilmente podría ser acoplados con un teléfono diferente en caso de robo

De acuerdo con el informe de HP, «Los resultados de nuestra investigación fueron decepcionantes, pero no sorprendentes.» Como resultado, HP está dispuesta a trabajar con los fabricantes de «construir la seguridad en sus productos antes de ponerlos en el mercado».

Y para subirse al carro del SmartWatch, el tema de la seguridad será cada vez más importante. Por un lado, los usuarios deben tomar precauciones para protegerse contra el riesgo de exponer información personal. Esto incluye hacer lo básico, como la creación de una pantalla de bloqueo (o asegurar que el SmartWatch que se compra tiene esta característica de inicio).

Pero los fabricantes deben jugar allí papel también. Los consumidores pueden no ser conscientes de que sus smartwatches son vulnerables, pero los gigantes de la tecnología como Apple, con décadas de experiencia en seguridad de datos para sus ordenadores y dispositivos móviles, sin duda deben ser conscientes del problema.

Las probabilidades son, que si se produce una violación significativa de la seguridad - algo así como que el SmartWatch de alguna celebridad sea hackeado – esto hará que sea una corriente principal y, finalmente, sea abordada. (VJ)