La historia se repite como las aventuras de la marca en el mercado Chino, una vez más para presentar su nueva colección a un público Oriental.

A veces parece que hay demasiados fabricantes de relojes con sede en Suiza por ahí labrándose un nombre. Créanme, intenté durante mis primeros días en Europa Star como una misión impuesta recordarlas a todas, sólo para comprobar que me había dejado algunos grandes nombres en la lista. Efectivamente, me enteré de que había marcas que me había perdido que eran de hecho Suizas, y que estaban en el juego de la industria de relojes de lujo.

He aprendido la lección por ahora. Debido a que hay tantas marcas de relojes de lujo por ahí, que suelen buscar mercados fuera de los Europeos y Americanos relativamente más ricos para conseguir un pedazo del pastel. Piense, por ejemplo, en marcas actuales como Enicar y Titoni. Bellos relojeros por derecho propio, algunos de ustedes podrían no haber oído hablar de ellos porque su enfoque operativo principal ha sido siempre el Lejano Oriente.

H. Moser & Cie también utilizaron para adaptarse una estrategia similar. En 1828, el relojero Suizo Heinrich Moser fundó la compañía en San Petersburgo, Rusia. La marca estableció rápidamente una reputación de producir relojes elegantes e ingeniosos. Pronto, se podrían ver en las muñecas de todo el Imperio Ruso y lo largo de la Ruta de la Seda en Asia Central, Persia y China.

La marca ha tenido una fuerte presencia en el Este históricamente. Pero no fue hasta este año que H. Moser & Cie. celebró el lanzamiento oficial de la marca en Pekin con una recepción para periodistas Chinos y clientes excepcionales.

El objetivo del lanzamiento fue reavivar la relación que el anciano Moser estableció en el siglo XIX. Por supuesto, también sirvió como una oportunidad para la marca para hablar directamente con socios clave en ese mercado de alto potencial.

El evento fue un medio para volver a sumergir al mercado Chino en el mundo de H. Moser & Cie. La compañía presentó su nueva colección 2015, con la estrella del show siendo el sublime Endeavour Perpetual Calendar Funky Blue. El reloj cuenta con un ingenioso sistema para visualizar el mes, gracias a un movimiento propio HMC 341. El movimiento con doble barrilete proporciona hasta siete días de reserva de marcha, que pueden ser monitorizados en la esfera. Y hablando de la esfera, su color fumé azul celeste es una reinterpretación provocadora del bien conocido reloj clásico de la marca.

No hay una mejor manera para H. Moser & Cie. de mostrar su patrimonio empresarial al mercado Chino que con este reloj clásico. Simplemente tiene que preguntarse por qué la marca tenía que reintroducirse a si misma en un mercado en el que ha tenido un éxito histórico. Tal vez simplemente muestra el valor de pisar la carretera que se dirige a Oriente, una vez más. (VJ)