orque el sonido es una vibración que se puede relacionar con el mundo de las emociones, es a través del sonido que la aventura de Biver continúa: con una repetición de minutos. Esta complicación, a la vez útil y poética, manifiesta el sonido de la eternidad.

“Haz algo diferente”. Tal como lo ven la leyenda de la industria relojera y el legendario coleccionista Jean-Claude Biver y el amante de los relojes históricos que es su hijo Pierre Biver, significa un regreso a los orígenes de la relojería. Hacer las cosas de manera diferente también se trata de elegir comenzar con la complejidad. Por eso el primer capítulo del libro que ahora se escribe es una repetición de minutos.

Es importante entender que, para Jean-Claude y Pierre Biver, la tecnología está al servicio de la filosofía de los fundadores, y no al revés. “Queremos que el repetidor de minutos sea la piedra angular de la marca”, explica Pierre Biver, “hecho con un diseño con el que ambos podamos identificarnos y con un movimiento que sirva a la estética que definimos. Un reloj contemporáneo, inspirado en la tradición y representativo tanto de mi padre como mío”.

Pierre y Jean-Claude Biver

Pero, ¿cómo hacer que el repetidor de minutos, un mecanismo inventado en el siglo XVIII, sea contemporáneo? “Con un sonido nuevo y diferente que seguramente hará que los coleccionistas agucen sus oídos. Agregamos un tercer martillo, que requiere un ajuste muy fino del tempo para obtener el tono perfecto”, explica Pierre Biver.

Y así, durante el proceso creativo impulsado por padre e hijo, la repetición de minutos se convirtió en un carillón. “También optamos por un tourbillon con jaula de titanio, que lo hace más liviano pero también más desafiante para decorar, así como puentes modernos; y para alimentar el reloj tenemos un micro-rotor”, añade.

Cuando se toma el tiempo de mirar todos los detalles que hacen que el repetidor de minutos Biver sea único, es cuando comienza a comprender la búsqueda incesante e intransigente de la perfección detrás de este reloj. Incluso las partes más pequeñas, incluidas las que no se ven, han sido decoradas a mano de acuerdo con los más altos estándares artísticos; han sido pulidos, satinados, graneados y pavonados.

Es en el acabado donde se reconoce la firma Biver: una búsqueda de la belleza invisible. “Decidimos decorar todas las caras de todos los componentes del movimiento”, dicen los Bivers. “Para lograr esto, tuvimos que presionar a nuestros socios para que desarrollaran técnicas para decorar ciertas partes de las piezas que originalmente no estaban diseñadas para ser decoradas. La parte inferior de los puentes, por ejemplo, está granulada a mano, lo que rara vez se hace”.

Otro ejemplo: la esfera de piedra, en sodalita, está abombada, todo un desafío. “Es muy difícil de hacer por su grosor infinitesimal: la piedra pegada a una placa de oro tiene 1,15 mm de alto; contando los índices aplicados, la altura total es de solo 1,6 mm. La piedra delgada como una oblea en sí no supera los 0,6 mm. La dificultad reside en obtener este aspecto abombado sin roturas durante la fase de pulido.”

Este reloj no es de los que revelan todos sus misterios a primera vista. Cada uno de sus elementos constituyentes tiene un significado a los ojos de los Bivers. Nos da mucho más que la hora, los cuartos y los minutos. Este modelo es una destilación de la cultura relojera dirigida al entusiasta ilustrado.

“Tiene una sensación de pasado y presente: nuestras esferas están abovedadas, un guiño a la relojería de tiempos pasados, pero nuestros índices son modernos y curvos. Nuestras agujas tienen forma de dauphine con crestas cepilladas, los ángulos están pulidos y la parte superior tiene un acabado satinado”, dice Pierre Biver. Dondequiera que vague el ojo, hay algo para atraparlo. Dondequiera que mires, los juegos de luces y sombras cuentan una historia contrastante. El movimiento de la luz sobre el reloj evoca el paso del tiempo, haciéndose eco de toda la filosofía que sustenta la marca Biver: construir un puente temporal que une pasado, presente y futuro.

El brazalete metálico de cinco eslabones está especialmente diseñado para la marca. Pero aquí los eslabones parecen querer romper con la sombra para entrar mejor en la luz. “Fue construido como un brazalete integral, pero en realidad es intercambiable”, explica Pierre Biver. “En cuanto a la corona, que es la conexión más directa entre el reloj y el usuario, queríamos que fuera sustancial, con un aire vintage”. A través de una lupa se puede ver que el surco está pulido y la cara interna de cada diente está chorreada con microesferas.

A pesar de su precio, o quizás por eso, este repetidor de minutos fue diseñado para usarse todos los días, en todas partes y en cualquier circunstancia. La carcasa es resistente al agua hasta 5 ATM (unos 50 metros). “Es a prueba de agua y el propietario puede llevarlo a la piscina, aunque no recomendamos usarlo para nadar todas las mañanas”, sonríe Pierre Biver. “Es una forma de desdramatizar la repetición de minutos, de sacarla de su contexto habitual, y sobre todo de su caja”.

“Aunque son muy valiosas, queremos que nuestras piezas sean fáciles de usar, realmente ’fáciles de usar’, y que el coleccionista las disfrute a diario. La elección de un movimiento automático equipado con un micro-rotor hace que este reloj sea absolutamente de uso diario. Vemos la tecnología al servicio de nuestra visión, pero sobre todo al servicio del cliente. La mejor manera de darle vida a un reloj es usarlo”, agrega.

El repetidor de minutos Biver es a la vez una pieza de colección y un objeto de curiosidad. Más allá de encarnar el arte de la relojería, transmite mensajes más sutiles. El reloj tiene una energía propia: además del sonido que emana de él, también está la energía de la piedra que conforma su esfera. Las esferas están hechas de piedra dura: obsidiana plateada o sodalita. “Elegimos estas piedras por sus atributos espirituales, por la energía que irradian. La sodalita es calmante y tiene una cualidad protectora. La obsidiana plateada tiene que ver con el renacimiento«, explica Pierre Biver.»También es una forma de reconectarse con la energía de la Tierra".

La belleza del reloj proviene de una yuxtaposición de elementos contradictorios: acabados satinados y pulidos, líneas rectas y redondez, sombra y luz, pasado y presente, sonido y silencio. De esta tensión nace un equilibrio. Todos los componentes que contiene este reloj, todos los materiales, todos los acabados, forman un todo tan vivo como las dos personas que los eligieron y que confiaron a otras –“las manos que hacen el milagro”– la tarea de construir este repetidor de minutos. .

Paradójicamente, cuando miramos el reloj, nos olvidamos del paso del tiempo. ¿Pero importa? “Un reloj tiene valor para nosotros por su aspecto espiritual, por el alma que lleva”, dice Jean-Claude Biver. “Porque un objeto sin alma es un objeto muerto. Queremos dar a luz al alma del reloj”.

ESPECIFICACIONES TÉCNICAS

• Nombre: Carillón Tourbillon Biver
• Funciones: Horas, minutos, tourbillon, repetición de minutos de carillón, micro-rotor
• Movimiento: JCB-001
• Tipo: Calibre automático, bobinado por micro-rotor
• Dar cuerda y poner en hora: a través de la corona (2 posiciones)

Características del calibre

• Número de componentes: 374
• Joyas: 44 rubíes
• Diámetro: 34mm
• Reserva de marcha: 72 horas
• Especificidad: micro-rotor de platino con placa decorativa en oro rosa
• Frecuencia: 21.600 vibraciones por hora (3Hz)
• Decoraciones: puentes de oro blanco, pulidos en negro y graneados; componentes de acero, pulidos en negro y satinados; biseles, pulidos en negro y de grano recto

Esfera

• Pantalla: agujas de horas y minutos doradas (oro rosa u oro blanco), satinadas y biseladas a mano
• Esfera: sodalita abovedada o piedra dura de obsidiana plateada
• Marcadores de hora dorados aplicados (oro rosa u oro blanco)

Caja y pulsera

• Material de la caja: Titanio u oro rosa u oro rosa/titanio
• Diámetro de la caja: 42 mm
• Grosor de la caja: 13,70 mm
• Cristal: Zafiro con revestimiento interior antirreflejos
• Fondo de caja: fondo transparente con cristal de zafiro
• Resistencia al agua: 5 ATM (50 metros, aprox. 160 pies)
• Brazalete: Titanio u oro rosa u Oro rosa/Titanio, diseño exclusivo BIVER de cinco eslabones
• Correa de cuero incluida
• Hebilla: Hebilla y pasador (correa de piel) en oro rosa o titanio

Precio (sin impuestos):

• Desde 520.000 CHF / 520.000 EUR / 550.000 USD