os tourbillons de Julio Verne constituyen una trilogía de joyas de la relojería, cada una de las cuales le lleva a un viaje artístico único. El primero de la serie es el modelo denominado “A la luna”, que presenta un meteorito lunar de excepcional rareza.

“Los futuros propietarios pueden personalizar su reloj eligiendo entre una selección exclusiva de materiales raros para la esfera. Esto hará que ese reloj sea absolutamente único. Para el tourbillon “A la luna” de Julio Verne, la esfera se convierte en un lienzo en el que los patrones orgánicos del meteorito lunar se fusionan con las líneas armoniosas y regulares de un guilloché tradicional. Jean-Marie Schaller, propietario y director creativo de Louis Moinet.

Los tourbillons de Julio Verne fueron diseñados para ser personalizados. En el centro de la esfera hay un espacio que permite al futuro propietario seleccionar un disco de piedra único tallado a partir de un meteorito lunar, un ópalo o un lapislázuli. Sólo se ofrecerán ocho discos de cada material, elaborados a mano y que revelan un patrón único.

El disco central de estos tourbillons de Julio Verne estará engastado en un guilloché periférico. Este riguroso oficio implica producir cuidadosamente motivos encantadores grabando suaves surcos en una superficie metálica. Luego, el guilloché aplica un barniz translúcido a la superficie, que añade profundidad y brillo a la decoración.

El tourbillon “A la luna” de Julio Verne nos conecta con el espacio exterior gracias a su esfera en la que aparece el meteorito lunar. Ocho fragmentos individuales de este material muy raro procedente de la luna ofrecen una opción única para hacer que el reloj sea único en su tipo. De hecho, cada corte de piedra revela una misteriosa estructura de mármol que crea una relación especial con ese cuerpo celeste en constante cambio que se muestra casi todas las noches.

El patrón guilloché que rodea el meteorito llama la atención jugando sutilmente con la luz ambiental. Consta de arcos regulares recubiertos de un barniz translúcido verde.

Los tourbillons de Julio Verne cuentan con un tourbillon volante descentrado que desafía la gravedad de una manera sorprendente y fascinante. El mecanismo de cuerda manual tiene un resorte de doble cilindro. El sistema, conocido como volte-face, tiene un cañón montado boca abajo sobre el otro. Descargan su energía simultáneamente, entregando una reserva de marcha de noventa y seis horas.

Estas extraordinarias obras de arte están enmarcadas por una caja de oro rosa de 18 quilates 5N, con un diámetro de 40 milímetros y que exhibe líneas fluidas y tensas. El cristal de zafiro abombado, una proeza técnica impresionante, ofrece una visión completa del tourbillon y de muchos otros detalles fascinantes de la esfera. En cuanto a las asas caladas, subrayan la integración de la correa.

ESPECIFICACIONES TÉCNICAS

Caja Material Oro rosa 5N de 18 quilates | Pulido y satinado

Diámetro 40,7 milímetros

ESFERA Y MANECILLAS

ESFERA Guilloché bajo barniz verde translúcido, centro en meteorito lunar

MANECILLAS Horas, minutos, facetados y esqueletizados, con materia luminiscente

MOVIMIENTO

Funciones Horas | Minutos | tourbillon volante

Tipo Cuerda nual con doble barrilete.

Oscilaciones 28.800 vibraciones por hora

rubíes 26

Reserva de marcha 96 horas

Resistencia al agua 30 metros