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Jaquet Droz Tourbillon Skelet Ceramic Skull Pink Pointillism: la muerte nunca se vio tan bien

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abril 2024


Jaquet Droz Tourbillon Skelet Ceramic Skull Pink Pointillism: la muerte nunca se vio tan bien

Pocas veces un Tourbillon Skull ha llegado tan lejos. Chic y al mismo tiempo punk, perfectamente controlado pero completamente salvaje... Una hábil combinación de extremos, ejecutada por los maestros artesanos de Jaquet Droz. Una pieza única elaborada a mano en un atrevido color rosa engastado en una caja de cerámica negra intensa, ofrece una visión del tiempo suspendido entre la vida y la muerte; un carpe diem encapsulado en un reloj tan audaz como esquivo.

S

ólo habrá una pieza, ya que nació de la imaginación de un único coleccionista. Jaquet Droz hizo realidad esta visión. El Tourbillon Skull Pink Pointillism es un encuentro de mentes. Por un lado, un amante de la alta relojería que ha traspasado los límites de la tradición para crear la suya propia. Por el otro, un maestro relojero con experiencia en esta tradición que se remonta a más de 250 años, que hoy ofrece una visión de Legado Disruptivo que abarca los siglos y las artes para producir piezas únicas y de gran belleza.

En el corazón de la pieza se encuentra el movimiento Jaquet Droz Tourbillon Skull, una creación original que es una versión esqueletizada y atomizada del famoso diseño en forma de ocho. En la parte superior se encuentra el tourbillon, que refleja las horas y los minutos descentrados a las 6 en punto. Sobre la arquitectura esquelética suspendida, una calavera de oro de 18 quilates esculpida y pintada a mano ofrece una interpretación desconcertante del dicho “tempus fugi”. La pieza transmite el paso del tiempo con la calavera, un elemento clásico de la naturaleza muerta, combinándola con el color más brillante y alegre, un rosa atrevido y llamativo.

Dentro de su intensa caja de cerámica negra, se exhibe una calavera dorada, grabada y pintada a mano con más de 3.000 puntos en un rosa vibrante, con un efecto explosivo. Irreverente y esquiva, la pieza está impulsada por un movimiento tourbillon patentado, con una impresionante reserva de marcha de ocho días.
Dentro de su intensa caja de cerámica negra, se exhibe una calavera dorada, grabada y pintada a mano con más de 3.000 puntos en un rosa vibrante, con un efecto explosivo. Irreverente y esquiva, la pieza está impulsada por un movimiento tourbillon patentado, con una impresionante reserva de marcha de ocho días.

Lo que realmente lo distingue es una técnica muy apreciada por los artesanos de Jaquet Droz: el puntillismo. Casi todo el cráneo está cubierto de puntos de pintura (más de 3.000 en total) aplicados individualmente a mano con pinceles, algunos de los cuales tienen una sola cerda. Los tonos de rosa realzan la geometría del calibre, un diseño moderno y estructurado que resalta tanto el material como el movimiento y los espacios intermedios. Con perfecta armonía, esta composición se encuentra en el interior de una caja de cerámica de un negro intenso y desenfadado, que refuerza el contraste con el rosa de la calavera y la correa de caucho texturizada que la acompaña.

Precio: 181.000 CHF (IVA incluido)

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