El Astar fue concebido y diseñado por el famoso arquitecto Suizo Rino Brodbeck. El reloj en sí ha sido hecho por Janvier SA, una empresa fundada por Vianney Halter, uno de los relojeros más imaginativos de principios del siglo XXI, y ganador del Grand Prix de Genève Innovation Prize en 2013.

Ha sido fabricado en Sainte-Croix, en el corazón de la región relojera de Suiza, con todo el cuidado y la consideración que exige el oficio.

Quince ejemplares y es ya una pieza de museo
Por dentro lleva un calibre mecánico de cuerda automática que ofrece una autonomía máxima de 38 horas. Se basa en un movimiento de ETA que dá la hora con gran precisión gracias a un ritmo de 28,800 vph. Este reloj excepcional es ya una rareza: sólo 14 coleccionistas podrán adquirir uno, porque una de los quince ejemplares numerados manufacturados, el número 11, para ser exactos, ya se ha convertido en parte del inventario del Museo de Relojería de Ginebra.

Este pieza de acero inoxidable, cuya redondez impecable abraza algo cercano al minimalismo total tiene un diámetro de 40 milímetros y una altura de 10 milímetros. En cuanto a los colores y materiales, la esfera es de un azul, semejante al espacio, mientras que el oro (el disco de las horas), la plata (el disco de los minutos) y los diamantes (para el segundero) han sustituido a las agujas tradicionales.

El poder Simbólico del Tiempo
El Astar del arquitecto Suizo Rino Brodbeck evoca el orden cósmico.

Es algo más que un instrumento para medir el tiempo atado a la muñeca de uno. Este reloj también desempeña un papel más espiritual, a saber, el de establecer una simbiosis con el universo astral, de ser capaces de llegar a una percepción del infinito que nos permite pensar, amar, crear y actuar.

Los seres humanos no somos los amos del tiempo. El mundo que hemos creado impone un impulso que está en total disonancia con el ritmo muy astral que estamos sometidos. Y debido a que la hora, el minuto, y el segundo son meras convenciones sociales y formas de controlar la propia disponibilidad, un reloj acaba de inventarse con las horas que hacen referencia al Sol, los minutos a la Luna, y los segundos a Venus. Así que en un análisis final, el Astar de Rino Brodbeck es el espejo de un sistema celeste que conecta el pasado con los tiempos modernos. Es un reloj que llega, literalmente, a las estrellas, de forma tensa, ya que está inspirado en el simbolismo inspirado.

Fuente: ASTARWATCH / Rino Brodbeck