Algo acerca de este nuevo modelo lo distingue, Louis Erard no podría estar más en su elemento.

Retorno a 1931 y los orígenes de la marca, cuando las funciones de telemetría y taquímetro estaban en constante demanda, y cuando los cronógrafos marcaban el tiempo en dos contadores.

Avance rápido a 2017, y esta creación sigue estando en el centro de las tendencias. Volúmenes, curvas, materiales, colores y personalidades no han envejecido ni un día. A ciertas funciones se les asigna simplemente un papel más estilístico que práctico. El mensaje es alto y claro: ¡rabiosamente vintage! ¿Que mejor lugar para este modelo que la colección 1931?

Movimiento automático, 42,5 milímetros de diámetro, cristal de zafiro con tratamiento antirreflectante en ambos lados para captar el ojo, mientras que el cuero marrón con patrón de cocodrilo tomar su señal de los originales. Al igual que la esfera cuyos contadores cronológicos se superponen a las escalas del taquimetro y el telémetro, poniendo el énfasis en la funcionalidad y la legibilidad. Este reloj decididamente masculino atraerá al aventurero urbano que, ahora como entonces, espera que su reloj le proporcione precisión, elegancia y estilo moderno.

Fuente: Europa Star TIME.BUSINESS/TIME.KEEPER Dic. 2016 - Ene. 2017