El inicio del calendario relojero puede ser un momento difícil para las marcas de relojes más pequeñas. Entre el SIHH en Ginebra y Baselworld en Basilea, es fácil que una marca de nicho se caiga entre las grietas.

No es así con Schofield, la joven marca Británica que lanzó recientemente su último modelo, el Telemark.

El elegante Telemark de Schofield

Aquellos de ustedes que sigan las Olimpiadas de Invierno podrían estar familiarizados con el concepto de Telemark. Es un estilo de esquí que se originó en una ciudad Noruega que lleva el mismo nombre. Hoy en día, un aterrizaje sólido de «Telemark» es lo que los saltadores de esquí necesitan para tener la oportunidad de obtener una medalla.

Todo lo que quiero decir es que me gusta el nombre «Telemark» para un modelo de reloj. Ahora bien, ¿qué pasa con el resto?

En muchos sentidos, el Telemark se basa en los éxitos anteriores del modelo Daymark. Ese fue el primer modelo de la «casa» lanzado por la compañía con sede en Sussex, y rápidamente desarrolló una base de admiradores leales.

Es cierto que también me gustó el aspecto del Daymark, que cuenta con una caja de un solo cuerpo de acero inoxidable tratada con chorro de vapor, una esfera utilitaria y agujas de gran tamaño. Esas mismas características son claramente prominentes en el Telemark, lo que es un buen comienzo.

Una cosa que es obviamente diferente es que este es un reloj con una esfera en blanco, que es la primera para la marca. Pensé que la elección del estilo estaba inspirada en la nieve y el esquí, dado el nombre del reloj, pero no fue así.

Al parecer, el diseño está inspirado en una línea de costa fuera de las Islas Británicas. El diseño también se basa en una película de 1965 llamada «Los héroes de Telemark», que aparentemente es un éxito con multitud de seguidores. Cualquiera que sea la inspiración detrás de él, el reloj logra un buen equilibrio entre lo robusto y lo refinado.

La esfera es limpia y el marcador desplazado de la fecha a las 4:30 es una buena adición. Está rodeado por el símbolo Unicode de un faro o una mina de contacto naval, según el punto de vista.

La esfera está totalmente numerada y recuerda a los elementos de diseño Bauhaus. Las agujas iluminadas de gran tamaño que son la firma de la marca se suman a la gran visibilidad del reloj.

Trasera de la caja del Telemark mostrando un faro

En el interior, el caballo de batalla ETA 2824-2 mueve el reloj, un calibre fiable y de coste relativo. Realmente no puede equivocarse con ninguna opción de la familia 28xx de movimientos de ETA, que tienen un largo legado que se remonta a Eterna y la década de 1950.

Cuando todo está dicho y hecho, el Telemark me parece un reloj sólido. Y como ventaja adicional, es genial ver que la relojería Británica comienza a hacer algunas ondas, y quizás pronto, en la industria.