inza es uno de los distritos más prestigiosos de Tokio, conocido por sus boutiques de lujo. El distrito de referencia en Japón por las mejores experiencias y el servicio de excelencia, ya que ofrece la mejor selección de actividades culturales y de lujo. Ubicado en el corazón de la ciudad, el vecindario de Ginza se convierte en un verdadero Hokosha Tengoku, literalmente un paraíso para los peatones, los fines de semana cuando la arteria principal está cerrada al tráfico. También es conocido por su arquitectura contemporánea y sus edificios diseñados con líneas y formas innovadoras y modernas.

Es en este famoso escenario, a solo unos pasos del emblemático cruce de 4-chome de Ginza y del cruce de Higashi Ginza y del mítico teatro Kabuki, donde Bell & Ross abre su primera boutique en Tokio.

La apertura de esta nueva boutique en el corazón de una de las capitales más dinámicas del mundo, solo sirve para resaltar la importancia que Bell & Ross le da a la expansión internacional, con la marca expandiéndose actualmente en más de sesenta países. Funcionalidad en sustancia - estilo atemporal en forma. La superficie se reconecta con el principio rector de la marca. Esta fue la premisa cuando el Creative Studio de Bell & Ross - dirigido por Bruno Belamich, cofundador de la marca - diseñó íntegramente la decoración interior de la boutique.

Impulsada por el Manifiesto de la marca donde lo esencial nunca se ve comprometido por lo superfluo, la decoración interior muestra un diseño moderno y ordenado para ofrecer una sensación de transparencia.

De un vistazo, la fachada de la boutique afirma la filosofía de la marca y su identidad visual corporativa. La referencia que inspiró el diseño de esta tienda: la del mundo de la aviación. Tanto los escaparates como las vitrinas se imaginaron como estructuras de fuselajes de aviones. Ligeros y resistentes.

Cada una de las cuatro vitrinas al aire libre está asociada con cada uno de los cuatro temas de la marca: aviación, buceo, F1® y urbano. Dentro de la boutique se expondrán todos los modelos de la colección. De hecho, es uno de los pocos lugares del mundo donde se puede encontrar la colección completa.

Antes que nada, el primer y principal espacio está lleno de texturas minerales. El suelo de hormigón recuerda a los asfaltos y los hangares de aviones. Se hace eco de las bandas luminosas del techo que hacen referencia a la señalización luminosa de las pistas de aterrizaje. Esta zona se intercala con el uso de mármol negro que simboliza los aspectos preciosos y auténticos del emblemático color negro de la marca, el del salpicadero. Contrasta perfectamente con el blanco inmaculado del techo.

En el centro de la tienda hay dos consolas monolíticas. La primera, diseñada en vidrio transparente y plexiglás esmerilado, se erige como un tótem luminoso. Estará dedicada a los últimos lanzamientos de productos. La segunda, realizada en mármol negro, destacará los modelos más sofisticados y exclusivos de la colección.

El segundo espacio es cálido e íntimo, que da un lugar de honor a los diseñadores de muebles. Un área dedicada al cliente para mirar más de cerca los relojes y sus detalles mientras está sentado en el sofá con la forma del fuselaje de un avión.

La calidez aportada por el roble claro en la pared y la suavidad de la lujosa alfombra blanca completan este ambiente acogedor. Toda la zona contrasta a la perfección con la frialdad de las columnas y estanterías de mármol negro mate - donde los accesorios y piezas de colección trazan la historia de la empresa - y la dureza del hormigón. En la pared de roble, tres relojes negros icónicos indican tres zonas horarias diferentes correspondientes a tres países queridos por Bell & Ross: Ginebra, la capital de la relojería; NYC, la capital del mundo; y Tokio, la capital de Japón. Como en las salas VIP de los aeropuertos. Por último - pero no menos importante - el área VIP alberga una pantalla gigante que transmitirá y contará todas las historias de la marca y sus novedades.