or casi dos milenios, un intercambio cultural bidireccional entre Asia y Europa ha tenido una profunda influencia en todas las formas de arte de Oriente y Occidente, desde las artes visuales hasta las escénicas, así como en las técnicas para producir textiles, vidrio y cerámica. Este es un intercambio que Jaeger-LeCoultre ha adoptado a lo largo de la historia de la Manufactura. Coincidiendo con los 90 años del Reverso, Jaeger-LeCoultre celebra este continuo intercambio cultural con un nuevo y exquisito reloj Reverso Tribute Enamel.

Uniendo la artesanía Europea con el arte Japonés, la caja del reverso celebra el arte Oriental con una pintura en miniatura esmaltada que reproduce fielmente una impresión en madera de la cascada Kirifuri realizada por Katsushika Hokusai a principios de la década de 1830. La cascada Kirifuri está tomada de A Tour of the Waterfalls of the Provinces, una serie de ocho grabados en madera que representan cascadas que el artista visitó entre 1831 y 1833 en diferentes regiones de la isla principal de Japón, Honshu.

Encarnando la creatividad de La Grande Maison y su visión del mundo del arte y la cultura, el nuevo reloj es testimonio del talento y la habilidad de los artesanos que trabajan en el atelier Métiers Rares® (Rare Handcrafts) dentro de la Manufactura Jaeger-LeCoultre.

En un proceso cuidadosamente orquestado que comienza con el fondo de caja, la decoración de este reloj presentó muchos desafíos que eran particulares de esta obra de arte. El primero de esos desafíos fue reproducir una obra de 37 x 24,5 cm en una superficie de poco más de una décima parte del tamaño del original, capturando cada detalle en una escala perfecta, incluido el grupo de diminutas figuras humanas en la base de la cascada.

Para expresar el poder y la belleza del agua mientras cae en cascada 100 metros por la ladera de la montaña, Hokusai usó un mayor sentido de perspectiva y colores más atrevidos para la Kirifuri Waterfall que en su trabajo anterior. El esmaltador no solo tenía que imitar esto a la perfección, sino también crear la ilusión de la técnica de impresión en madera, que produce un efecto específico completamente diferente al esmaltado. Un desafío particular es que las impresiones multicolores requieren el uso de múltiples bloques de madera, con cada color diferente aplicado a su vez, y existía el desafío adicional de reproducir el efecto bokashi de colores sutilmente matizados y graduados que se ven en el original. Para lograr estas ilusiones, la maestra esmaltadora de Jaeger-LeCoultre tuvo que desarrollar su propia técnica.

La simplicidad de la esfera del Reverso Tribute, con sus índices de aplicación facetados y agujas Dauphine, valora plenamente la belleza de su decoración. Una respuesta artística a la pintura en miniatura en el fondo de la caja, esta esfera está decorada con un patrón guilloché ondulado inusual elegido para hacerse eco del efecto del agua en movimiento. Realizado a mano, utilizando un torno centenario para el que se ha labrado una leva especial para lograr este patrón en particular, el efecto visual de las ondas se amplifica con capas de esmalte grand feu translúcido en un tono suave de verde que coincide exactamente con un detalle de la pintura en el reverso.

Después de múltiples cocciones para construir las capas de esmalte, el desafío final es la aplicación impecable de los índices (que requiere perforar pequeños orificios a través de la superficie prístina del esmalte) y la transferencia del registro del chemin de fer minutes.

Al igual que con todos los esmaltes, el proceso de cocción puede cambiar los colores de formas impredecibles, por lo que tanto para la parte posterior como para la parte delantera del Reverso Tribute Enamel Hokusai, se requirieron muchas horas de investigación y experimentación para que el color de la esfera coincidiera perfectamente con la pintura y al revés, y que la pintura daría una interpretación fiel de los colores originales de Hokusai. Además de estas horas de investigación, se deben dedicar casi cinco horas de trabajo solo al guillochage, seguidas de ocho horas de trabajo para las capas de esmalte verde translúcido. Se requieren más de 70 horas de trabajo solo para pintar la obra maestra en miniatura en la parte posterior de la caja.

ACERCA DE HOKUSAI

El artista japonés más conocido en Occidente, Hokusai (c. 1760-1849) fue un ilustrador, grabador y artista de ukiyo-e muy prolífico. Su fama quedó asegurada cuando tenía más de ochenta años, gracias a su monumental serie de grabados en madera Treinta y seis vistas del monte FujiI, que incluyeN La gran ola de Kanagawa (Kanagawa oki nami ura), una de las obras de arte más conocidas del mundo. (Jaeger-LeCoultre honró ese trabajo al reproducirlo como una pintura de esmalte en miniatura en un Reverso de edición limitada en 2018).

Gracias a la locura por la pintura ukiyo-e, que representaba el estilo de vida hedonista de la clase comerciante en Edo Japón (1600-1868), la impresión en madera floreció entre los siglos XVII y XIX, como una forma de reproducir esas pinturas. Innovador en su composición y uso del color, Hokusai jugó un papel decisivo en la transformación del ukiyo-e de un estilo de retrato en un género más amplio que incluía paisajes, plantas y animales. Como consecuencia de su fama, el ukiyo-e y los grabados en madera se volvieron fundamentales para formar la percepción Occidental del arte Japonés.

ESPECIFICACIONES TÉCNICAS

• Caja: oro blanco
• Dimensiones: 45,5 mm x 27,4 mm x 9,73 mm
• Movimiento: Jaeger-LeCoultre Calibre 822, cuerda manual. Funciones: Horas, minutos
• Reserva de marcha: 42 horas
• Esfera: Esmalte Guilloché y Grand Feu
• Fondo de la caja: Pintura en miniatura de esmalte Grand Feu Resistencia al agua: 3 bar
• Correa: cocodrilo negro
• Referencia: Q39334T2 - Edición limitada a 10 piezas