acido a mediados de la década de 1950, el cronógrafo Air Command es probablemente el reloj Blancpain más raro de su época. Los únicos rastros existentes de su pasado son los pocos fragmentos de información recopilados esporádicamente en las subastas, donde las piezas del Air Command han obtenido precios estratosféricos, y los recuerdos dispersos atesorados por los descendientes de la gran “familia” Blancpain de la década de 1950.
El nuevo Air Command de Blancpain, que se une a la colección homónima, refleja plenamente el espíritu del reloj de piloto antiguo. Cuenta con un cronógrafo flyback y un bisel giratorio tipo cuenta regresiva. La función flyback es un elemento valioso para los pilotos, ya que les permite con una sola pulsación restablecer la operación de cronometraje actual y comenzar una nueva mientras el cronógrafo está funcionando.
Con un cronógrafo convencional, cada nueva medición requiere tres presiones, en dos pulsadores separados, para detener, restablecer y reiniciar el mecanismo. El propósito del bisel de cuenta regresiva es indicar el tiempo que queda hasta llegar al destino. Sus números o marcadores de hora van en sentido contrario a las agujas del reloj, a diferencia de los del bisel de un reloj de buceo. El Air Command de Blancpain también tiene una escala taquimétrica que indica la velocidad del suelo, un contador de 30 minutos con tres marcadores alargados que marcan incrementos de tres minutos y un contador de 12 horas.
Blancpain ha optado por resaltar estas indicaciones mediante un color azul profundo que dinamiza el carácter del reloj, infundiendo el toque perfecto de modernidad. La esfera está realzada por un fino patrón de rayos de sol, mientras que los contadores del cronógrafo están finamente encajados. Este contraste realza la legibilidad del reloj, que es óptima tanto para el día como para la noche gracias al uso del bisel del reloj, que incorpora un inserto de cerámica resistente a los arañazos a juego con el color de la esfera.
Para intensificar aún más las emociones provocadas por un reloj de esta naturaleza, Blancpain ha equipado ambos lados de su modelo Air Command con un cristal de zafiro “glass box”, un fuerte elemento estético de los modelos de los años 50.
La parte posterior del reloj revela el movimiento Manufactura F388B (una variante del F385), que se distingue por un volante de silicio de resorte libre que oscila a una frecuencia de 5 Hz. El diseño refleja la filosofía de Blancpain de precisión y robustez. El conjunto de resorte y volante de resorte libre regulado por tornillos de inercia fue concebido para facilitar los ajustes finos y aumentar la resistencia a los golpes. En comparación con los muelles de volante metálicos de uso general, el muelle de volante de silicio es insensible a los campos magnéticos y garantiza una mayor precisión en toda la reserva de marcha. La frecuencia de 5 Hz no solo contribuye a mejorar la precisión, sino que también permite una división clara de los segundos en intervalos de 1/10.
El movimiento F388B comprende un sistema de rueda de pilares con un embrague vertical Blancpain altamente avanzado que garantiza un arranque y una parada perfectos sin las sacudidas que ocasionalmente ocurren con las construcciones horizontales. Es de cuerda automática y está rematado por una masa oscilante de oro calado con un acabado de caracol idéntico al de los puentes del calibre. Esta coherencia estética se ve acentuada por el color del rotor, que coincide con el de la caja del reloj.
Disponible en oro rojo o titanio de grado 23, una variedad de alta gama que rara vez se usa en la relojería, la caja de 42,5 mm de diámetro es resistente al agua hasta 3 bar (aproximadamente 30 metros). Alternando entre superficies satinadas y pulidas, como en los bordes exteriores de los cuernos y las superficies de contacto de los pulsadores, revela un refinamiento que confirma el carácter prestigioso del nuevo Air Command. El modelo se combina con una correa de piel de becerro azul con costuras blancas que le dan el toque final al aspecto deportivo de este reloj de piloto.