I
nstantáneamente, cuando pensamos en China y la relojería, pensamos en la producción en masa a gran escala, «la fábrica mundial», productos baratos... Y, por supuesto, esta es una buena parte de la realidad en el terreno. Pero dada la importancia cada vez mayor de China, tanto en la producción de relojes como en la compra de relojes, se está estableciendo un ecosistema mucho más complejo y matizado en el país.