1. MEISTER S CHRONOSCOPE de Junghans

La marca Alemana es especialista en cronógrafos, especialmente a través de su gama Meister. Lanzados en la década de 1930, estos modelos alcanzaron su apogeo en las décadas de 1950 y 1960. El nuevo Meister S le da un toque moderno a esta línea deportiva. Movimiento automático J880.1 con segundero pequeño, indicador de fecha y día, cronoscopio con segundero. Un cristal de zafiro robusto y una resistencia al agua de hasta 20 bar resistirán los desafíos más exigentes.

2. M2 COASTLINE CHRONOGRAPH de Tutima

El relojero de Glashütte agrega una nueva versión de cronógrafo a su gama M2 de modelos particularmente robustos. Con un diámetro de 43 mm, el nuevo modelo está equipado con una caja de titanio que es a la vez muy ligera y muy resistente. Hay disponibles dos variantes de esfera, en negro mate o azul, diseñadas para una máxima legibilidad, detrás de un cristal de zafiro antirreflectante. El modelo está equipado con el nuevo calibre automático 310 de Tutima, con una reserva de marcha de 48 horas.

3. LA SPORTIVE LIMITED EDITION de Louis Erard

Un modelo deportivo que es particularmente importante en el rediseño continuo de las colecciones del relojero independiente, La Sportive está disponible en cuatro versiones de cronógrafo, cada una producida en una serie limitada de 250 piezas. Todas ilustran la filosofía de la marca: máxima sustancia mecánica a un precio asequible. Los modelos cuentan con una caja de titanio o bronce de grado 5, una esfera neo-vintage ahumada y un cristal de zafiro extra-abovedado. Están equipados con un calibre Valjoux 7750.

4. CHRONOMASTER REVIVAL SHADOW de Zenith

Zenith tiene una vasta herencia en la que basarse. Para este modelo, la marca ha optado por basar su diseño en un prototipo de cronógrafo de cuerda manual montado en una caja de acero ennegrecido que data de 1970, desenterrado de sus archivos. Es un modelo que no se había producido ni comercializado, hasta hoy. En consecuencia, hemos tenido que esperar 50 años para descubrir este reloj, con su caja de 37 mm de titanio granallado y un movimiento que no es de cuerda manual, sino automático, a diferencia del prototipo de 1970, que no era otro que El Primero. Ahora, irónicamente, ha surgido de las sombras.

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